El gobierno local propone una modificación puntual de la actual ordenanza de veladores, cuya principal novedad es el cambio del horario actual. Éste pasará a ser de 9 a 1.30 horas todos los días, sustituyendo a la actual apertura en función de las vías y los tipos locales, una división que el Concello entiende como "liosa y sin demasiada utilidad", en palabras de la concejala de Promoción Económica, Anabel Gulías.

Se establece a mayores la posibilidad de introducir modificaciones puntuales (a cargo de la Junta de Gobierno, Alcaldía, mediante un bando etc) para ampliar los horarios más allá de momentos específicos como la semana grande o la Feira Franca. Estos cambios se harían en función de las fechas y las necesidades de la hostelería y del empleo del espacio público en momentos como el Carnaval, los puentes etc.

Otras novedades afectan a la guardia material de los elementos empleados en las terrazas, como mesas, sillas o estufas. En la actual ordenanza solo pueden situarse en la calle a partir de las 11 de la mañana y el Concello propone "una solución intermedia, una vez que se abra el local se podrán retirar las mesas y sillas del interior del local si bien no colocarlas hasta las 9 de la mañana", explicó la edil.

Ésta iniciará en breve los contactos con los hosteleros, grupos políticos etc para presentar esta modificación, que en todo caso será provisional a la espera de la futura ordenanza de uso del espacio público, una nueva normativa que anunció esta misma mañana la titular de Promoción Económica.

Hasta su entrada en vigor tras una elaboración que se prevé larga y engorrosa, será esta modificación puntual la que regule las terrazas, con un régimen de sanciones que contempla multas de entre 300 y 3.000 euros, en función de que la infracción se considere leve, grave o muy grave. También se vigilará "escrupulosamente", matizó la concejala, el empleo del espacio público.

Otras novedades son la supresión del artículo relativo a la viñeta (se realizará otro sistema de control de veladores mediante nuevas tecnologías), la ampliación del espacio libre en las aceras, la introducción de una herramienta para que el Concello regule el uso de terrazas en zonas complejas o en las que se produzcan conflictos de intereses entre locales.

La normativa entrará ahora en una nueva fase de exposición a los grupos políticos y la previsión es que entre en vigor antes de final de año.