El área arqueológica de Tourón, que acoge lo que muchos expertos consideran como el mejor conjunto de petroglifos de Galicia, se ha sometido a labores de acondicionamiento integral acometido por el Concello de Ponte Caldelas. A punto de finalizar la corta integral de los matorrales que invadían las más de 15 hectáreas de superficie de espacio arqueolóxico, los resultados de esta extensa actuación ya son bien visibles.
El gobierno tripartito aborda así lo que supone la primera actuación integral de la historia de este espacio, inaugurado en 2007 y que se encontró en un franco deterioro. Además de la limpieza de la vegetación invasora, que alcanzaba más de tres metros de altura y suponía un claro riesgo de incendio, abordó la reparación integral de todo el vallado perimetral de madera, que estaba en pésimo estado. En su tratamiento se repusieron más de 350 postes y travesaños. Anteriormente, se procedió al acondicionamiento de la red de caminos, a la renovación de todas las señales explicativas de los diferentes grupos de insculturas pétreas, completamente quemadas por el sol, y, finalmente, se hicieron reparaciones y mejoras en el edificio del Centro de Interpretación.
El alcalde, Andrés Díaz, realizó una visita a Tourón para comprobar los resultados de una actuación municipal que calificó como "impresionante por su extensión y por los resultados que se aprecian". Asimismo, indicó que solo queda pendiente la zona más alta, con fuerte pendiente, donde se detectaron árboles invasoras como las acacias, que es preciso controlar para que no se extiendan.
Andrés Díaz destacó la dificultad de esta limpeza, pues la maquinaria utilizada quedaba literalmente sepultada por la vegetación "en una zona abandonada desde hace una década". Además, el trabajo se vió dificultado por la propia orografía, que es complicada, y está marcada por las pendientes, la existencia de canales de agua, producto de las catas sobre el terreno realizadas hace años. La limpieza sirvió también para descubrir muchos robles y abedules de pequeño tamaño que estaban completamente ahogados por la maleza.
