Las quejas de algunos conductores por el uso exclusivo del gallego en las señales de tráfico se han convertido ya en habituales ante el Valedor do Pobo en los últimos años, sobre todo cuando hay multas de la Policía Local por el medio.

Y en el informe de Milagros Otero no falta una referencia a esta asunto, en concreto una en laque se pidió la "mejora de la señalización urbana en una zona de aparcamiento de la ciudad" que fue aceptada en mayo pasado por el Concello.

El afectado se quejaba de la "deficiente señalización en la ciudad de una zona restringida para el estacionamiento que llevó a la imposición de una sanción". La Valedora admite que "la multa no podía ser anulada, porque la infracción existió", pero añade que "la colocación de las señales podía ser mejorada".

En materia lingüística, también se recibió una queja por la existencia de "carteles médicos exclusivamente en castellano en el Complejo Hospitalario de Pontevedra".