El nuevo edificio judicial de A Parda será la principal inversión económica de la Xunta en la ciudad de Pontevedra para el año 2017. El proyecto de ley de presupuesto entregado ayer por el conselleiro de Economía, Valeriano Martínez, en el Parlamento gallego reserva una partida de 11,25 millones de euros para el grueso de la obra de construcción de este inmueble a lo largo del año próximo, unos trabajos que comenzaron a ejecutarse en agosto de este mismo año y que se completarán de manera definitiva en 2018. Para ese año, el texto presentado ayer por el gobierno autonómico reserva otros tres millones de euros.

Este será el gran proyecto de la Xunta para este año en la ciudad, aunque también se ponen en marcha otras actuaciones también muy esperadas pero que no reciben un impulso económico tan destacado en las cuentas de la Xunta. Se trata, por ejemplo, de la ampliación del hospital de Montecelo. Se reserva una partida de un millón de euros para iniciar un proyecto que, según el conselleiro de Sanidade, debería comenzar con las obras a finales de 2018 o principios de 2019, como muy tarde.

Se prevé entonces que este millón de euros permita avanzar en las actuaciones previas como por ejemplo la contratación "en seis u ocho meses" de la redacción del proyecto constructivo del Gran Montecelo. El documento de presupuestos de la Xunta no aclara las partidas que se reservarán para el proyecto del hospital en los próximos ejercicios.

Otro de los proyectos para el que se reserva una partida en el presupuesto es el de la remodelación de la estación de autobuses y su conexión con la de ferrocarril para garantizar su intermodalidad. Es también una partida discreta, de cien mil euros, que tiene como objetivo la puesta en marcha de una actuación en la que la Xunta está todavía perfilando algunos detalles con el Concello de Pontevedra. El documento recoge que esta iniciativa recibirá un gran impulso en 2018, con medio millón de euros más y se concretará de manera definitiva en 2019, cuando se prevé una inyección definitiva de capital de dos millones y medio de euros.

El otro gran proyecto anunciado por la Xunta en la ciudad de Pontevedra es el rescate y rehabilitación de su antigua sede de Benito Corbal, un edificio que hoy se encuentra en estado de abandono. Aunque no se recoge una partida específica para esta actuación, desde el Partido Popular, la diputada Lupe Murillo, destacaba ayer que esta actuación "tendrá acceso inmediato a las partidas ya previstas por la Consellería de Facendo, según se vaya necesitando y vaya avanzando la tramitación administrativa del proyecto, que ya fue adjudicado y que ahora mismo está en fase de redacción".

La variante de Alba, espera

Fuera se quedan, como pedía el BNG, algunas partidas que estimaban necesarias como la necesaria para iniciar las obras de la variante de Alba. Desde el PP garantizan, no obstante, que este vial que permitirá mejorar la comunicación en el norte de la ciudad y resolver los problemas de seguridad vial en la PO-222 (especialmente en el tramo que coincide con el Camino Portugués) se pondrá en marcha "a lo largo de esta legislatura. Lo mismo dicen para otros proyectos que se anunciaron durante la campaña electoral, como la nueva residencia de mayores para la ciudad o el pabellón para gimnasia. Tampoco aparecen partidas específicas para la reforma de la carretera a Vilagarcía, paralizada desde hace años.

El presupuesto de la Xunta también recoge partidas importantes en materia educativa aunque no desglosa su destino final. Es por ejemplo el caso de los 2,2 millones que se destinan a la mejora y ampliación de talleres en los Centros Integrados de Formación Profesional, una partida de la que un 40% irá a parar a los institutos de la provincia.