Lui Volina, un albanés que se encuentra en estos momentos encarcelado en su país por lo que no pudo comparecer ante el tribunal, es el eje en torno al que gira el último juicio por narcotráfico que comenzó ayer en la Audiencia de Pontevedra. El fiscal acusa a tres de los 8 encausados de trabajar para este supuesto narcotraficantes albanés. El tal Lui, radicado en Caldas y con un piso en Vilanova que utilizaría para guardar la droga, tenía bajo sus órdenes, según el fiscal, a tres de los acusados que ayer se sentaron en el banquillo. Se trata de Francisco Javier S. A., quien fue el único de los gallegos implicados que reconoció haber participado en una operación de compraventa de seis kilos de heroína a un grupo de extranjeros que viajaron en febrero de 2013 desde Barcelona a Vilagarcía con la droga. Fue sorprendido por la Policía en compañía de los tres extranjeros (Andy H., albanés; C. E., rumano y Guido M., italiano) cuando viajaron a Vilagarcía con los diez kilos de heroína ocultos en uno de los dos coches que utilizaron en el viaje.

En su declaración, y pese a reconocer los hechos, Francisco Javier exculpó a los otros dos acusados que supuestamente trabajaban en la provincia de Pontevedra para el tal Lui. Se trata de Sterling D. B. C. (vecino de Baión) y Mario G. P. ( de Caldas). Del primero el fiscal sostiene en su escrito de acusación que supervisaba con Francisco Javier las entregas de droga organizadas por Lui. Él lo niega. De Mario G. P. sospecha que realizaba envíos de dinero al extranjero por indicación de Lui. En su declaración, Mario negó cualquier relación con el tráfico de drogas, pero sí reconoció alguno de estos envíos de dinero. Aseguró que no tenía constancia de que fuera dinero procedente de ningún delito y que eran de exportaciones e importaciones de Lui. El fiscal quiso saber qué tipo de productos y el acusado respondió que "capachos de la vendimia". El fiscal se extrañó de que se enviasen hasta 24.000 euros para "comprar capachos".

La Fiscalía pide inicialmente 11 años de prisión para Francisco Javier, Sterling y Mario y 9 años para el resto de los acusados.