La Xunta de Galicia, a través del Consorcio Galego de Servizos de Igualdade e Benestar, comenzará esta misma semana, tal y como estaba previsto desde el pasado mes de julio, las obras de mejora y reparación en la escuela infantil de Ponte Caldelas.
El Consorcio aclara a lo manifestado por el alcalde que envió el pasado 1 de agosto una carta al regidor, Andrés Díaz Sobral, en la que le informaba del inicio de las obras en el mes de agosto, "aprovechando el cierre de los colegios durante las vacaciones de verano". Le explicaba que las mejoras serán "financiadas íntegramente"por ese ente autonómico "a través del plan extraordinario de inversiones de la Xunta", que es posible gracias "al cumplimiento de los objetivos de déficit por parte de la Comunidad autónoma".
La carta, de la que se juntaba memoria técnica valorada de las actuaciones previstas, avanzaba también que el Consorcio procedería a reparar el toldo del patio de la guardería de Ponte Caldelas, "a pesar de que dicha reparación le corresponde al Concello, en virtud del convenio de gestión formalizado en febrero de 2009" entre las dos administraciones, que especifica claramente que los gastos de mantenimiento del centro los debe asumir el consistorio.
El gerente del Consorcio Galego de Servizos de Igualdade y Benestar, Perfecto Rodríguez, mostró su sorpresa al conocer que el regidor de Ponte Caldelas reclama ahora unas obras que ya estaban previstas por el ente autonómico desde el pasado mes de julio, "de las que estaba informado en tiempo y forma y que sabía que se iban a realizar en agosto".
La memoria técnica valora que el Consorcio envió al alcalde el pasado 1 de agosto, incluía el presupuesto total de las reformas, que ascendió a casi 15.000 euros.
Las actuaciones previstas por el Consorcio contemplan la instalación del sistema de climatización, la reparación del toldo exterior, el arreglo de las humedades en las aulas dos y tres, en la sala multiusos y en la cocina, la colocación de termómetros con lectura de temperatura en las dependencias del colegio, protectores para las esquinas de las mesas y otros muebles, antipilladeros, una berja como barrera de seguridad para los niños, dispositivos antipánico en las puertas de salida de emergencia, una pileta infantil con la altura adecuada, acolchado en zonas elevadas de hormigón en el patio exterior, pomos nuevos en las puertas, protección acolchada en el cristal interior, cantoneras de protección para las esquinas y la reparación de los rodapies.
En definitiva, una renovación total del centro que no solamente le proporcione una nueva cara sino una mayor seguridad.
