El juzgado de Cambados ha puesto punto y final a la investigación por un presunto delito de cohecho pasivo cometido supuestamente por el presidente de la Federación Galega de Fútbol y expresidente de la Diputación, Rafael Louzán. El juzgado remitió ya la causa a la Fiscalía de Delitos Económicos de Pontevedra cuyo responsable, Augusto Santaló, la está revisando antes de adoptar una decisión: solicitar la apertura de juicio oral contra Louzán, el exdiputado provincial Severino Reguera y su esposa (presentando escrito de acusación) o pide el sobreseimiento.
Esta segunda opción parece la menos probable a tenor de la trayectoria de este caso en el que el fiscal ya ha presentado una querella contra Louzán en 2014 y se opuso a las solicitudes de archivo que realizaron las defensas en dos recursos ante la Audiencia Provincial. Recursos que fueron rechazados por el tribunal. El fiscal en su querella acusa a Louzán de recibir dádivas de Reguera en forma de alquileres hasta un 60% por encima del precio de mercado por unos locales en Navia, Vigo.
