La documentación intervenida por el Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) en la pieza separada referente al Concello de Pontevedra en el marco de la Operación Pokemon incluye correos que hacen referencia a posibles "regalos de navidad" que la empresa Aquagest realizaba a técnicos y políticos de múltiples ayuntamientos de Galicia.

Así, los agentes incluyen en el atestado que han presentado al juzgado de instrucción número 1 de Lugo un "listado de regalos intervenidos zona suroeste" que se encontró en el ordenador del responsable de Aquagest en Pontevedra. Ese listado detalla el nombre de la "explotación" a la que corresponde el sujeto en cuestión, el cargo que ocupa y su dirección. El listado (que no especifica fecha) incluye alcaldes (la mayoría de ellos de ellos hoy ya exalcaldes) de localidades como A Pobra, Riveira, Rianxo, Cambados, Ponte Caldelas, Soutomaior, Pontevedra, Ribadumia, A Cañiza. Meaño, así como concejales, técnicos y otros funcionarios de los concellos de Boiro, Ribeira y especialmente Pontevedra, en donde aparecen citados hasta 9 técnicos y el anterior presidente local del PP en Pontevedra. Igualmente, se recoge en la lista al delegado territorial de la Xunta. El informe de Aduanas se limita a reseñar este listado aunque no indica si hay constancia de que se llegaran a recibir los regalos ni de qué tipo de presentes se trataría, de existir.

Regalos solo a los VIPS

No es la única referencia a posibles regalos de navidad por parte de Aquagest a funcionarios y cargos públicos. Vigilancia Aduanera también interceptó correos electrónicos en los que responsables de Aquagest se enviaban listas como la anterior y comentaban la necesidad de estudiar "el tipo" de regalo y el número que deberían comprar para "los técnicos que no están en la lista". Otro año, con la crisis ya encima, un directivo de la concesionaria del agua en Pontevedra pregunta si "este año no vamos a hacer regalos de Navidad", obteniendo la respuesta: "a los VIPS, sí".

También las escuchas telefónicas hacen referencia a la posible recepción de regalos por parte de funcionarios del Concello de Pontevedra. Así, un responsable de Aquagest en Santiago realiza una llamada a una persona que Aduanas identifica presuntamente con un trabajador del ayuntamiento capitalino al que, tras felicitar las fiestas, le pregunta si "recibió una caja que no ponía nada". Cuando este le responde afirmativamente, le dice que se la habría enviado otro directivo de Aquagest, a lo que este funcionario respondió que "se lo figuraba".

Otra de las llamadas intervenidas habla del posible envío de un regalo al concejal Raimundo González Carballo que este no habría llegado a recoger, o al menos no hay constancia de ello. El directivo de Aquagest indica que lo dejen en las oficinas de esta empresa en Pontevedra.

Venta de un coche

Los agentes de Aduanas llaman la atención también sobre otro hecho que consideran relevante para explicar las relaciones entre los directivos de Aquagest y altos funcionarios del Concello de Pontevedra. Así, hay varios correos electrónicos que hacen referencia a la venta de un vehículo Citröen C5 propiedad de esta empresa a un ingeniero municipal. A los investigadores les llama la atención el hecho de que los Aquagest arregle el vehículo antes de la venta. Señalan que no iban a dar parte al seguro de los daños que presentaba pero como este funcionario se va a quedar con él sí creen conveniente dar parte y que el vehículo quede en las mejores condiciones.

Esto se suma a los viajes que investiga la jueza de Lugo a partidos de baloncesto y fútbol, comidas en restaurantes y viajes que supuestamente abonó Aquagest a concejales y técnicos del Concello de Pontevedra. Aduanas incluye un listado de "viajes pagados por el grupo empresarial Aguas de Barcelona" (al que pertenece Aquagest) a funcionarios del ayuntamiento y que tenían como destino Madrid, Barcelona o San Sebastián.

En este último caso se hace mención también a una llamada telefónica en donde, según Aduanas, uno de los investigados en la trama asegura que un responsables de Aquagest en Santiago le explicó en una ocasión que "fue cuatro días de viaje con los ingenieros de Pontevedra a hacer una ruta gastronómica por León, País Vasco, Barcelona..." y que fue "a los mejores restaurantes de cada lugar y donde cada factura no bajó de los 3.000 euros".