El desarrollo de la XVI edición de la Feira Franca de Pontevedra tuvo lugar con relativa tranquilidad. Según el balance provisional que hace el Concello (hasta hoy no ofrece datos oficiales), la normalidad fue la tónica general de una jornada que comenzó rozando el mediodía y que terminó para algunos en la mañana del domingo.

Entre los incidentes que tuvieron lugar el pasado sábado destacó uno producido por unos jóvenes en el centro histórico, que prendieron fuego a unas balas de paja decorativas, lo que provocó la intervención de los Bomberos en la plaza de Curros Enríquez y la calle Don Gonzalo.

Además, y como es habitual en noches tan largas como la del pasado sábado, se produjo alguna que otra pelea entre jóvenes de escasa gravedad. Según testigos presenciales, pasada la media noche, dos coches de la Policía Nacional acudieron, alertados por los vecinos, a un piso de la calle Echegaray donde unos jóvenes celebraban una fiesta particular.

Entre las actuaciones llevadas a cabo por el puesto médico habilitado para tal fin en el Teatro Principal se registraron dos lipotimias por la mañana, unas horas en las que el sol fue el protagonista, e incidentes menores como cortes o caídas.

Por otro lado, los trabajos de limpieza de todo el Recinto de la Feira Franca comenzaron con las primeras luces del domingo. Los decorados se retirarán a partir de hoy.