Los trámites para la ejecución del primer tramo de la ronda urbana de Pontevedra ya están en marcha. La Diputación de Pontevedra adjudicó ayer la redacción del proyecto de construcción de la ronda este de Pontevedra entre la PO-542 (Ponte Bora-O Pino) y la PO-532 (Pontevedra-Ponte Caldelas), acceso a Montecelo y Príncipe Felipe. La empresa adjudicataria del proyecto, por un importe de 37.649 euros, es Eptisa.
Así lo aprobó ayer la Junta de Gobierno del ente provincial, cuyo presidente, Rafael Louzán, también anunció que el contrato de asistencia técnica corresponderá a dos actuaciones. Por un lado, la redacción del proyecto citado anteriormente para la ronda y, por otro, la presentación de un documento independiente en el que se recoja el proyecto constructivo de una pasarela peatonal para conectar la avenida de Domingo Fontán con el entorno del nudo de Bomberos. Esto es, dar continuidad a las aceras desde el puente de As Correntes en Domingo Fontán hasta la zona de la Comandancia de la Guardia Civil, sobrevolando la autopista AP-9 con una pasarela.
Eptisa se alzó con el concurso al que se presentaron un total de diez empresas. El plazo de ejecución para la redacción del proyecto será de cuatro meses.
Con esta licitación echa andar el proyecto para construir la ronda urbana de Pontevedra, un vial que pretende funcionar como una circunvalación interior de conexión de las áreas periurbanas de la ciudad, aunque sin pretender ser una circunvalación, papel que jugaría la A-57.
Un kilómetro de longitud
Lores y Louzán pactaron la ejecución de este vial en abril de 2013, cuando se firmó el convenio, y se calcula que el coste del vial será de 2,3 millones de euros. Es una carretera convencional de un kilómetro de longitud entre la PO-542 (O Pino-Bora) en O Marco y la carretera de Ponte Caldelas (la PO-532) en la zona de San Mauro, que obligará a expropiar al menos unos 15.000 metros cuadrados y que contará con un carril para bicis y peatones de cuatro metros de ancho, se configura como el primer tramo de la ronda urbana. Tras adjudicarse estos días su proyecto, el calendario apuesta por comenzar este año las expropiaciones y las obras en 2015, para disponer del vial en 2016.
El convenio que selló esta actuación cifra el presupuesto total en 2,42 millones de euros, de los que la Diputación aporta un millón y se encarga de redactar el proyecto y tramitar las expropiaciones, aunque las financiará el Concello con un previsión inicial de 500.000 euros. Las obras se pagarán a partes iguales, a razón de 900.000 euros cada administración.
Este es el primer tramo de la futura ronda que se va a ver reflejado sobre un papel, dado que el resto todavía no están en marcha por lo que esta circunvalación interior está bastante lejos de convertirse en una realidad.
La ronda conectaría la carretera de Vilagarcía a la altura de Alba con la Nacional 550 en Salcedo, pasando por Mourente y San Mauro hasta llegar a O Marco y de allí a la carretera de Vigo.
