Los afectados por las participaciones subordinadas y preferentes intensificaron ayer sus protestas en Pontevedra y, a lo largo de la mañana, cerraron durante unas dos horas la sucursal de Novagalicia Banco (NCG), situada en la calle Herreros.

Miembros de las plataformas de Marín-Pontevedra, O Salnés y Redondela acudieron hasta la oficina con la intención de boicotear su funcionamiento realizando ininterrumpidamente diferentes operaciones. Sin embargo, una vez que los afectados se concentraron en la entrada y comenzaron las protestas, los responsables del banco optaron por cerrar las puertas.

Previamente, como vienen realizando desde hace semanas, las plataformas se concentraron frente al edificio de la Subdelagación del Gobierno para concluir en la Diputación, donde varios de los portavoces volvieron a solicitar una reunión con el presidente provincial, Rafael Louzán.

Aunque en un primer momento fueron recibidos por la diputada provincial Ana Isabel Vázquez, Louzán, que se encontraba en el edificio, decidió mantener un encuentro que se prolongó algo menos de una hora.

"Nos ha dicho que está poniendo todo su empeño en que los arbitrajes continúen a partir del 15 de junio, si es real que se produce el canje", manifestó tras la reunión la portavoz de la plataforma Marín-Pontevedra, Fátima Entenza.

El presidente de la Diputación también informó que los casos de arbitrajes se "se están intensificando". No obstante, esto "no está ocurriendo en las plataformas que hemos acudido a la reunión", lamentó Entenza.

Por último, Louzán manifestó a los afectados la intención de poner a su disposición un equipo de asesoramiento jurídico, así como que las "tasas sean gratuitas", de cara a la posibilidad de que se interpongan futuras demandas. "Nos dijo que en breve nos llamarán para volvernos a recibir", concluyó Entenza.