Los abogados insisten en que la aplicación de la ley de tasas afectaría a muchas situaciones cotidianas y a multitud de ciudadanos. "Si un vecino no paga un alquiler o un inquilino no le devuelve una fianza habrá que pagar una tasa para reclamar esta cantidad antes de que el juez comience a leer el primer renglón de una demanda", explican. "Se prima al moroso y al deudor", explica Jáudenes.

Las tasas se incorporan por vez primera en el orden Social. Por ejemplo, litigar contra un despido que vulnera los derechos de un trabajador no tendrá coste inicial, pero el afectado tendría que pagar 500 euros por adelantado si quiere recurrir en súplica ante el TSXG y 750 más si pretende llevar su caso al Supremo. Otros casos más sangrantes son las reclamaciones de indemnización por accidentes de tráfico o los recursos contra multas y sanciones de la administración.