La Concejalía de Educación reclama a la Xunta que defina con rigor un mapa de adscripción y zonificación de los centros educativos del municipio, una planificación "clara y transparente que tenga en cuenta el futuro a corto plazo de los centros educativos, que incluya un modelo de transición justo y generoso con las comunidades educativas, que genera excelencia y que, especialmente, incremente el número de puestos escolares en el sistema educativo de la ciudad", señala el concejal Julio Castela.
Éste ha anunciado que convocará al Consejo Escolar Municipal para estudiar el conflicto de adscripción de la Escuela Infantil Concepción Crespo Rivas, que la Xunta sugiere fusionar con el colegio Campolongo.
La reunión se celebrará en próximos días, según avanzó ayer la Concejalía de Educación, y la misma se convocará la jefatura territorial de la Consellería de Educación a fin de que aclare sus previsiones sobre el sistema educativo público de Pontevedra.
Castela no oculta su preocupación y asegura que "parece que desde esa jefatura y hasta desde la Consellería de Educación, a través del director xeral de Centros, se crean problemas en vez de intentar ofertar soluciones de consenso, basadas en la sensatez y en criterios educativos".
El edil critica que "se esté provocando el enfrentamiento de las asociaciones de padres de los dos centros" y recuerda que el problema afecta a todo el municipio a nivel educativo "y aún más, en el centro de la ciudad se perderán 75 plazas de Infantil en una zona de alta demanda, sin que la Xunta comprometa nada a cambio", señala Castela.
Por otra parte, un grupo de padres que participaron en la reunión del pasado día 19 han mostrado su desacuerdo con la pretendida absorción del Crespo Rivas por parte del CEIP Campolongo. Consideran la fusión "la peor de las soluciones" posibles.
