Acostumbrados a prestar auxilio al ciudadano, ahora serán los agentes de la Guardia Civil los que reclamarán el apoyo de la sociedad para que salga adelante una iniciativa legislativa popular con la que pretenden mejorar sus condiciones laborales. Una iniciativa para que la necesitarán presentar, como mínimo, medio millón de firmas.

Uno de los colectivos promotores de esta iniciativa es la Unión de Oficiales de la Guardia Civil (UO), que ayer celebró una asamblea en Pontevedra que tenía como principal objetivo explicar a sus socios en que consiste dicha iniciativa legislativa parlamentaria que acaban de presentar en el Congreso. Juan José López Castro, coordinador territorial de la UO, y José Luis Martín Ramos, vocal de la junta directiva, explicaron que esta era la última alternativa que les quedaba tras más "de tres años de espera" y comprobar que el Gobierno "no cumple con lo establecido en la disposición final VII de la Ley de Carrera Militar que le obliga a desarrollar la Ley de Personal de la Guardia Civil".

¿Qué se pretende con esta iniciativa? Juan José López explica que el objetivo es "adaptar las normas del empleado público a la Guardia Civil, respetando siempre su propia peculiaridad y naturaleza militar". Así, por ejemplo, el documento permitiría caminar "hacia la igualdad efectiva entre hombres y mujeres, se solicita una atención especial durante el embarazo a la mujer, tratamiento adecuado a las víctimas de violencia de género y una necesaria conciliación de la vida laboral, personal y familiar". Desde la Unión de Oficiales recuerdan que la presencia de la mujer en la Guardia Civil es de en torno a un 6% y que el porcentaje se reduce a un 0,1% entre los oficiales. Para López Castro estas cifras demuestran "la dificultad de conciliar vida familiar y laboral con promocionarse en puestos superiores".

Sin embargo, para la UO, lo más novedoso de esta ley sería la "unificación" de las cuatro escalas de oficiales en la Guardia Civil. Una de ellas es la escala superior, que les recuerda "a un colectivo con unos privilegios tan de actualidad estos días". "Es como si ellos viajasen en AVE y nosotros en un tren regional", explica. Como ejemplo cita el hecho de que los tenientes que salen de la Academia General Militar con una media de 25 años tienen un mínimo legal de 13 años para alcanzar el puesto de trabajo más alto al que pueden aspirar. Lo suelen hacer en una media de 17 años. "Sin embargo, los de promoción interna tardamos una media de 30 años en alcanzarlo, es decir, lo haríamos a los 67, 68 años, cuando entramos en la reserva a los 62". Para López Castro sólo el 2% de los agentes de promoción interna podría completar la carrera profesional. "Lo que también pretendemos es que los ascensos se regulen fundamentalmente en función de los criterios de mérito y capacidad y no como hasta ahora que prima la antigüedad", dicen desde la UO. Además, señalan que puestos de mando como coronel o general "están vetados" a agentes de promoción interna o del cuerpo facultativo: "Un guardia civil puede ser Premio Nobel en auxilio al ciudadano o ser muy capaz para desempeñar este cargo pero no puede hacerlo", dicen.

La asamblea también sirvió para elegir a un nuevo delegado territorial de la UO en Galicia que será Miguel Soldán Lema.