Un agente de la Guardia Civil que se encontraba fuera de servicio en una propiedad tuvo que ser rescatado la tarde del domingo tras precipitarse a un pozo, desde una altura aproximado de 10 metros. Por fortuna, el agente, que estaba haciendo labores de reforma en el pozo, solo sufrió lesiones en un hombro y pudo ser rescatado por los bomberos. El hombre fue trasladado a un centro hospitalario de la ciudad, con pronóstico leve.

Los hechos se produjeron en el lugar de Aira Vella, a la altura del número 1. Fue un particular quien contactó con el 112 Galicia a las 18:30 horas para avisar del suceso. La central de emergencias del 112 movilizó al 061, a los bomberos de Xinzo, a la Guardia Civil y la Protección Civil de la localidad.