El Servicio Galego de Saúde procedió a la apertura del centro de salud de O Couto el pasado lunes sin contar con la correspondiente licencia de ocupación por parte del Concello. Así lo confirmó ayer el alcalde, Jesús Vázquez, al reconocer que el concejal de Urbanismo, José Cudeiro, tenía previsto firmar el correspondiente decreto. Algo que se produjo a última hora de la mañana de ayer, después de superar una incidencia de última hora con el sistema informático.

En cuanto a la supuesta "autorización verbal" a la que aluden responsables de la Consellería de Sanidade, el regidor fue tajante: "Las autorizaciones verbales no existen", aunque en un intento de restar importancia a ese argumento que se había esgrimido, explica que por parte del gobierno municipal "se le daba el visto bueno al plan de seguridad que se presentó".

Sobre esta cuestión, Cudeiro abunda en que el pasado viernes técnicos del Concello acudieron al propio centro de salud de O Couto, y todos los informes habían sido favorables, aunque quedaba pendiente el informe jurídico, que finalmente también fue favorable, pero que no llegó a Urbanismo hasta la mañana de ayer. Dicho lo cual, entiende que no se pudo hacer efectiva la concesión de licencia de ocupación y apertura hasta contar con todos los informes.

Después del revuelo que se montó con la apertura, y la reacción de los grupos de la oposición, así como por parte de partidos políticos sin representación en la Corporación municipal, el concejal de Urbanismo recalca que de la apertura del centro se enteró "por la prensa".

Es por eso que no duda en reconocer su sorpresa, ya que "no pasaba nada por esperar dos días más", sobre todo después de que su puesta en funcionamiento sufriese un retraso de un año y tres meses desde que la Xunta había previsto inaugurarlo, en agosto de 2016.

Lo que elude Cudeiro es cualquier tipo de responsabilidad sobre la apertura que se produjo el lunes sin tener la correspondiente licencia de ocupación. Y señala que "cada uno debe responder de sus actos", en alusión directa a sus competencias como concejal de Urbanismo. Aunque reconoce que "yo no hubiese abierto esas instalaciones sanitarias". Para quitar hierro a la polémica suscitada al hacer referencia a que "no hubo ningún tipo de problema". Sobre las críticas, el regidor cargó contra el PSOE, y envía el mensaje de que "tenemos que hablar de Ourense en positivo".