Su defensa presentará un informe para intentar salvarlo de la cárcel con el argumento de que es un adicto que se va a desintoxicar siguiendo un tratamiento. Porque la pena que ayer aceptó Morad B. implicaría, en principio, su ingreso entre rejas: un total de 3 años y 7 meses de prisión, multa de 18.000 euros y otra de 540 por un delito contra la salud pública y otro de falsedad en documento oficial. La Policía Nacional le incautó casi 3 kilos de hachís, lo que le hubiera reporta más de 16.000 euros de ingresos. Según queda acreditado con la conformidad, el traficante usaba un vehículo Volkswagen con matrícula de Países Bajos, manipulada con la intención de dificultar los seguimientos por parte de la policía.

Los agentes lo detuvieron a las 15.30 horas del 9 de junio de 2015, cuando el acusado -con estancia regular en España y sin antecedentes hasta la fecha- se dirigía en el automóvil, al garaje del número 3 de la calle Marcelo Macías.

En ese vehículo había 401,2 gramos de resina de cannabis. En otro aparcado en el garaje, los agentes hallaron en el maletero una bolsa escondida con 2,3 kilos de la misma sustancia. Además, el acusado llevaba en su ropa interior una bellota de 10 gramos de la droga. En la habitación donde vivía de alquiler los agentes hallaron una placa más de 99 gramos de cannabis, 17 bellotas de 171 gramos de la misma sustancia, 9 papelinas de cocaína -para autoconsumo-, 4.580 euros, diversos teléfonos móviles y otros objetos.