Las autopsias se hacen en el Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO) desde hace más de una década. Un convenio entre Xustiza y el Sergas de 2005 ofrece los centros hospitalarios para las pruebas post mortem del Instituto de Medicina Legal (Imelga).

Dos sindicatos denunciaron ayer el estado de las instalaciones. UGT exige una evaluación de riesgos laborales y Alternativas na Xustiza-CUT reclama "una solución urgente para evitar infecciones y riesgos sobre la salud de los trabajadores, a fin de que tengamos que evitar posteriores lamentaciones. No descartan ir a Inspección de Trabajo.

Fuentes del Servicio Galego de Saúde indican que en el nuevo edificio de hospitalización habrá un espacio mejorado.

En el actual, ubicado en el sótano del CHUO, el estado es "deplorable", según Alternativas. De acuerdo con su denuncia, la sala está "deficientemente aislada de las dependencias próximas", de modo que "los cadáveres judiciales son introducidos hasta la sala a través de una puerta y un pasillo por el que también entran o circulan productos de uso habitual en el hospital (ropa, material farmacéutico, alimentos) al no disponer de una entrada directa hasta la zona de mortuorio y cámaras de conservación, con el consiguiente riesgo higiénico-sanitario".

No hay luz ni iluminación, ya que las ventanas fueron tapiadas. En la sala de muestras del servicio de anatomía patológica se meten los productos de limpieza, según denuncian en una foto, entre otras críticas. Ambos sindicatos ven riesgo con el uso de formol por falta de medios de protección individual -tres equipos para una plantilla de 9 personas-, así como falta de sistemas de extracción inadecuados, muestras almacenadas en lo que debería ser una zona limpia de la sala y falta de ventilación. La puerta de acceso al almacén de muestras, al que se accede directamente desde la zona de despacho, siempre está abierta.