El proyecto Conecta Ourense liderado por la Diputación para crear un territorio cohesionado entre la capital provincial y su área metropolitana se ha quedado fuera de la convocatoria del Ministerio de Hacienda para la selección de estrategias de desarrollo urbano sostenible e integrado (Edusi) que serán cofinanciadas con fondos europeos. El presupuesto es de 18,7 millones de euros y la institución confiaba en captar 15 millones a través de esta convocatoria.
El Gobierno ya había denegado la subvención en el primer corte, el pasado mes de octubre, por lo que se habían introducido matices técnicos en la propuesta. Pese a las modificaciones, el proyecto no ha conseguido la puntuación necesaria para acceder al programa operativo FEDER de crecimiento sostenible 2014-2020, tal y como publicó ayer el Boletín Oficial de Estado, BOE.
En el marco de Galicia, tampoco obtienen la ayuda Carballo, Cangas y Cambre, mientras que sí han sido admitidas las propuestas presentadas por A Coruña, Ferrol, Arteixo y Ames, que suman fondos por 35 millones de euros.
El vicepresidente segundo de la Diputación y edil en el Concello de Ourense, Jorge Pumar, avanzó ayer que estudiarán en detalle las razones por las que el proyecto no ha pasado este corte. La resolución plantea todavía un plazo de diez días para presentar alegaciones. Tampoco se descarta una tercera convocatoria, como ya señaló en su día el Gobierno.
Este anuncio coincidió con la celebración de la festividad de Santa Rita, patrona de la administración local, por lo que las oficinas estaban ayer cerradas en el Concello y la Diputación. A la espera de "recibir la correspondiente notificación", Pumar avanza que estudiará con los técnicos la propuesta y la posibilidad de concurrir a una nueva convocatoria si llegase a producirse.
El proyecto Conecta Ourense se presentó en su momento como una estrategia importante para el concello de la capital y los siete de su entorno -Amoeiro, Barbadás, Coles, Pereiro de Aguiar, San Cibrao das Viñas, Punxín y Toén- ya que busca "conciliar" el desarrollo industrial y la recuperación económica de espacios sostenibles y con calidad ambiental, además de impulsar la movilidad urbana y periurbana. La Diputación reunió para ello a los alcaldes de los ocho ayuntamientos implicados, con el objeto de diseñar un plan para crear una "verdadera red urbana" que permita la comunicación fluida tanto en el interior de la capital como entre esta y su entorno más próximos.
Jorge Pumar confía en que este proyecto logre finalmente financiación, ya que entre sus prioridades está precisamente la de generar en torno a la capital un territorio cohesionado y sin barreras, estimulando el uso de las TICs y la implantación del concepto "smart" en todos los ámbitos.
