Mil personas se movilizaron en O Ribeiro para pedir 7.500 euros de ayuda directa por hectárea afectada por las heladas, con un tope de 15.000 euros por explotación. La manifestación, encabezada por varios tractores, partió a las once de la mañana del entorno del Instituto de Ribadavia, prosiguió por la rúa do Ribeiro, hasta el castillo, y finalizó en la Praza Maior, después de las doce y media. Fue secundada por el comercio de la villa, que mantuvo cerradas las puertas de los establecimientos hasta que concluyó la protesta.

El secretario general de Unións Agrarias de Galicia, Roberto García, resalta que "han sido los mayores daños registraron en el viñedo en los últimos cien años, según los historiadores", junto a los registrados en 1942 -recordado como "el año del hambre"-, 1973 y 1983. Alerta de que muchas familias "han quedado sin una sola uva, por lo que han perdido el 100% de su nómina, de sus ingresos".

La solución para esta gente "no puede ser la concesión de créditos; hay que concederle ayudas para cubrir el mínimo vital de los cosecheros". Por lo tanto, proponen que la administración conceda 7.500 euros por hectárea afectada en ayudas directas, condonación de las cuotas de la Seguridad Social, para los viticultores que están dados de alta y la realización de un estudio para la modificación de la ley de seguros agrarios, para que la administración pueda financiar hasta el 65%, dado que hasta ahora la póliza media en Galicia "recibe en torno a dos euros de subvención" de la Xunta. "Eso explica el fracaso del seguro agrario, donde apenas tenemos un 12% de pólizas", critica Roberto García.