El presidente de la Federación Gallega de Municipios y Provincias (FEGAMP), Alfredo García señaló ayer que "el transporte de viajeros es un servicio imprescindible para esta comunidad y hay que subvencionarlo desde las administraciones o nos cargamos el rural". Lo hizo en referencia a la próxima publicación por parte de la Xunta del nuevo mapa de transportes de viajeros de Galicia que reordena todo el servicio y que provoca la desaparición de 578 líneas de autobús cuyas empresas desechan al no ser rentables.

De esas más de 500 líneas de autobús que van a desaparecer, 150 están en Ourense, "lo que supone el 81% del total de las que que están en funcionamiento y la sitúa como la provincia porcentualmente más afectada; de hecho creo que algunas de esas líneas ya no están funcionado", indica Alfredo García.

Aprovechar líneas escolares

En la entrevista que mantuvo esta semana García con la conselleira de Infraestructuras, Ethel Vázquez, cartera de la que depende el nuevo mapa del transporte de viajeros de Galicia, "la conselleira señaló que ese mapa se someterá a información este mismo mes de mayo y habrá luego un plazo de alegaciones, aunque no adelantó por donde irá el nuevo modelo; aunque es de esperar que incluya el aprovechamiento por parte de los vecinos de los buses de transporte escolar que tengan plazas vacías", según indicó el presidente.

Las empresas concesionarias de estas líneas deficitarias renunciaron, un acuerdo con las Xunta les obliga a mantenerlo los servicios hasta este verano, en tanto no se elabore un nuevo mapa, pero tampoco facilitaron traspasar sus línea a otras empresas interesadas.

Un problema enquistado

La situación está enquistada desde hace años. De hecho en declaraciones realizadas en la primavera de 2008 a FARO por el presidente de las empresas de transporte de viajeros en Ourense, Fidel Martínez, este reconocía que "todas las empresas de la provincia tendrían que cerrar si desapareciera el transporte a las escuelas".

Añadía entonces que, salvo empresas fuertes todas vivían ya del transporte escolar, dado ese entorno rural "muy disperso, en el que los vecinos son gente mayor que se mueve poco y si lo hace utilizan el taxi o el coche de un familiar para ir a las cabeceras de comarca". El rural que describía hace nueve años, no cambió, sino que empeoró.