Unas 50 personas acudieron a la ruta arqueológica y medio ambiental organizada por el Centro de Estudios Chamoso Lamas y el Grupo Outeiro por el Monte Molín, entre las parroquias de Brués y Moreiras, en el Concello de Boborás, zona afectada por los incendios del mes de septiembre. Una ruta ilustrada por el arqueólogo Jorge Lamas que explicó los yacimientos formados por 11 mámoas, enterramientos de 6.000 años, y las zanjas de minería romanas, y de estaño y wolframio de épocas más recientes.

El biólogo Diego Reboredo dio a conocer los efectos del fuego sobre el patrimonio natural y la posterior pérdida de suelo, y como el bosque autóctono actúa de barrera natural. El Concello de Boborás, después del incendio en el que ardieron 512 hectáreas, preocupado por las consecuencias, solicitó al equipo multidisciplinar del Chamoso Lamas elaborar un informe para determinar los daños sobre dicho patrimonio, con el fin de tomar medidas de prevención y conservación. Durante la ruta muchos los vecinos se sorprendieron de la existencia de mámoas en la zona, e incidieron en la importancia de señalizarlas y preservarlas. En este sentido, Patricia Torres, edil de Cultura y Turismo, les indicó que se está trabajando en un proyecto de señalización y limpieza de estos yacimientos en Brués y en el resto del Concello. Ya por la tarde el presidente de la Sociedade Galega de Historia Natural e investigador del CSIC ofreció una charla sobre incendios forestales.