El rural fue durante muchos años la base principal de manutención de generaciones que se veían en la obligación de producir alimento de forma propia y autónoma con el mero objetivo de poder sobrevivir ante la falta de recursos económicos. La iniciativa del campo de trabajo "Un rural para todos", que lleva a cabo la asociación sin ánimo de lucro Sustinea en colaboración con el Concello de Ourense y la Dirección Xeral de Xuventude y Voluntariado de la Xunta de Galicia, recuperará esa esencia de la mano de diecisiete jóvenes llegados a la ciudad de As Burgas desde puntos diversos de la geografía nacional como Sevilla, Melilla, Valencia, Galicia e incluso desde algo más lejos: Rusia, Suiza y Francia. El objetivo es recuperar dos fincas de la ciudad que se encuentran en situación de abandono total, una en A Carballeira y otra en la calle Doctor Fleming, para convertirlas en huertas sociales que proporcionarán en un futuro alimentos a las familias más necesitadas.

El plan de actuación recoge actividades diversas como el propio acondicionamiento inicial del terreno, la plantación de verduras de otoño-invierno o el asesoramiento en materia de comercialización de productos, ya que, como afirma Paulo Vázquez, presidente de Sustinea, "el objetivo no es solo abastecer de alimentos a la gente que lo está pasando mal en estos momentos, sino también poder vender los excedentes en el mercado de Ourense"; además, el grupo de trabajo creará semilleros en los propios terrenos, analizarán la calidad del suelo, construirán casetas para almacenar materiales, montarán un invernadero y cercarán la finca.

Los jóvenes permanecerá en la ciudad realizando labores de preparación de los terrenos hasta el 11 de agosto. Durante este periodo, tendrán la oportunidad de realizar diferentes actividades complementarias que les ayudarán a desconectar y, a su vez, conocer más de cerca la ciudad en la que están alojados y sus alrededores. El día de su llegada, el pasado lunes, pudieron ver de cerca el centro de Ourense y darse un chapuzón en las termas. También visitarán el concello de Allariz, el jardín botánico de Montealegre y asistirán a charlas de carácter social impartidas por entidades colaboradoras en la iniciativa.

El objetivo a largo plazo de este proyecto que aúna política social y medioambiental radica en la futura "inserción sociolaboral de veinticino familias de Ourense que trabajarán durante un año en este huerto", declara Paulo Vázquez, quien afirma que, al rematar ese periodo, "buscaremos terrenos para que puedan trabajar de manera autónoma dejando libres estos terrenos para nuevas veinticinco familias que comenzarán un proyecto de cero. "Para Sustinea es un orgullo materializar un proyecto que llevamos buscando desde hace varias años", finalizó el responsable de la asociación promotora.

El alcalde de la ciudad, Jesús Vázquez, avaló la iniciativa de "traer el rural a zonas centrales de la ciudad" y agradeció la asistencia de los diecisete chicos y chicas en un proyecto definido por el regidor como una "oportunidad de generar empleo y riqueza en la ciudad aprovechando los recursos que tenemos".