P. F.L. de 56 años y vecino de Toledo respondía con dificultad a las preguntas de los agentes de la Guardia Civil de Tráfico. En estado semiconsciente acertó a balbucear que minutos antes había sentido la picadura de un insecto que se había colado por la ventanilla de su camión. Pudo sufrir una reacción alérgica a una avispa. Fue movilizada una ambulancia de Urxencias Médicas del 061, que atendió al chófer in situ y lo trasladó al hospital comarcal de Verín.

El vehículo pesado, un transporte de turismos desde Toledo a distintos concesionarios de Ourense y Pontevedra, estaba parado a las 20 horas de ayer en el arcén de la autovía das Rías Baixas, la A-52, en el Alto de Fumaces, en el término municipal de Riós. Una patrulla de motoristas del destacamento de Verín observó que en el kilómetro 150 de la autovía el trailer ocupaba la totalidad del arcén y una parte del carril derecho del sentido Porriño, por lo que decidieron acercarse.

Según la Guardia Civil, cuando los agentes se subieron a la cabina del camión hallaron al conductor en mal estado, aunque capaz aún de contar qué había sucedido.

Llegó a perder la consciencia

En un momento dado el conductor de 56 años de edad llegó a perder la consciencia, por lo que los agentes del instituto armado solicitaron la intervención urgente de los servicios sanitarios. El 061 desplazó al lugar a una ambulancia. Tras la pertinente valoración en el lugar de los hechos, una vez que el conductor había vuelto en sí, se decidió su traslado al hospital comacal de Verín.