Salió del bar tras haber consumido alcohol y se subió al coche. Un testigo vio que sus movimientos lo delataban. Llamó a la Guardia Civil para informar de sus sospechas. Su colaboración resultó fundamental para que el instituto armado localizara al infractor. Además de circular con más alcohol del debido en el organismo -duplicó la tasa de alcoholemia-, las pesquisas de los agentes descubrieron que circulaba pese a tenerlo prohibido. Una sentencia judicial le impedía ponerse al volante hasta 2020. El infractor, un vecino de Ourense, J. M. L. G., ha sido citado a un juicio rápido para responder en calidad de investigado por un delito vial.
La Central Operativa del Subsector de la Guardia Civil de Tráfico de Ourense recibió la llamada del testigo a las 21 horas de este martes. El ciudadano aseguró que había visto a un hombre saliendo de un establecimiento de hostelería del término municipal de San Cibrao das Viñas, a bordo de un Citröen Saxo con matrícula de Pontevedra. Según dijo, el conductor parecía ebrio.
Tráfico pasó el aviso a todas las patrullas de servicio. El individuo fue localizado cuando circulaba por el kilómetro 230 de la nacional N-525, en las proximidades de Ponte Noalla, cerca del Polígono San Cibrao.
Los agentes de la Guardia Civil invitaron al conductor a que se sometiera a la prueba de detección de alcohol. Tanto en la primera como en la segunda y definitiva, J. M. L. G. arrojó un resultado positivo de 0,51 miligramos por litro, lo que supone el doble de la tasa máxima permitida para la mayoría de automovilistas (0,25 mg / l).
Pero al continuar con las comprobaciones, los agentes constataron que el ourensano, además, se encontraba privado del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por una sentencia del juzgado de lo Penal Número 2 de Ourense. La condena establece la prohibición de circular hasta el 30 de noviembre de 2020.
Tráfico alaba la colaboración
Como consecuencia de estos hechos, la Guardia Civil de Tráfico instruyó un atestado contra el conductor, al que se le atribuye la autoría de un presunto delito contra la seguridad vial. Sin necesidad de practicar la detención, el hombre fue citado a pie de la calzada para comparecer en calidad de investigado ante el juzgado de guardia de Ourense.
El instituto armado quiso destacar ayer la importancia de la colaboración ciudadana, que "ha vuelto a ser decisiva para detectar a un conductor de riesgo".
