La juez aplazó el miércoles la declaración como investigado de José Luis Baltar por presuntos delitos de cohecho y tráfico de influencias en la causa contra su hijo, tras poner de manifiesto la defensa que carecía de copia de los audios en los que el exbarón fue grabado por la denunciante-investigada. "Hai que ter paciencia e conseguireino cando poida", respondía en uno. Baltar Pumar aludía en esa conversación grabada con el móvil a los "líos" que conllevan este tipo de "favores" (según la mujer, el expresidente le dijo que daría un puesto). Conseguida la suspensión, el abogado ha presentado un recurso de reforma y apelación para que la juez, o en su caso la Audiencia Provincial, dejen sin efecto la imputación del expolítico de 75 años. O, en todo caso, "se informe con detalle de los hechos punibles que se le atribuyen" en una resolución más motivada.

José Luis Baltar se queja, en boca de su abogado, el ourensano Luis Romero, de haber sido citado 6 meses después del inicio de las diligencias -cuando el plazo límite de la causa casi ha expirado, aunque la juez se acogerá a un artículo de la nueva ley para alargar la instrucción-, sin que se concretaran, entiende, los indicios contra el expresidente. Al ser llamado a declarar -en su tercera causa judicial tras una primera condena e inhabilitación por enchufismo- recibió copia de la denuncia y declaración de la mujer, copia del interrogatorio de su hijo, y el auto de enero que imputó a político y particular. La defensa subraya que la hipotética implicación de Baltar padre ya se derivaba entonces.

"Ya desde el inicio de la instrucción, el nombre de mi patrocinado ha sido impunemente utilizado para atribuirle todo tipo de manejos". La defensa se queja de que tanto en la denuncia como en el auto de enero de la juez "se están achacando a mi patrocinado conductas de carácter delictivo de las que no ha podido defenderse en ningún momento", razona el abogado.