La controversia con el nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de Ourense va más allá del propio documento que fue aprobado inicialmente, y ahora sigue su procedimiento administrativo, ya que su exposición pública se convierte en objeto de crítica por parte del grupo popular, relacionada con la exposición de fotografías que se realizó en la sala del antiguo edifico del Banco de España, así como un tríptico-desplegable que se repartió.

El alcalde, Agustín Fernández, fue escueto y evitó entrar en polémicas, en relación a que se gastase en total unos 44.000 euros en las mencionadas fotografías- 21.175 euros, y en el desplegable, una cantidad superior a los 22.000 euros, según los datos que aportó el portavoz popular, y así se limitó a señalar que "considera normal y eficiente el gasto".

Y eso que Rosendo Fernández aludió a un "dispendio" ese gasto, que en el caso de las fotografías ubicadas en el Banco de España, las elaboró Oficina de Planeamiento S.A., una empresa de Coruña a la que se le adjudicó la elaboración del nuevo planeamiento urbanístico, y cuyo coste superó el millón de euros, contando con la aportación de la Xunta con algo más de medio millón de euros, que se vería incrementado debido al coste por la elaboración de la cartografía, ya que la que había de 2003 no servia, como en su momento aseguró la concejal de Urbanismo, Áurea Soto.

La duda que tiene los populares, y sobre la que evitar hacer pronunciamiento alguno el gobierno socialista, es si ese trabajo no estaba contemplado en el contrato que en su momento firmó el Concello con la empresa adjudicataria de la elaboración del nuevo documento de planeamiento.

En cuanto al desplegable, los populares indicaron que se le había encargado a un empresa de Poio, que habría pasado una factura que superaba los 22.000 euros, coste de los desplegables que luego se repartieron, tanto en la planta del Banco de España donde permaneció expuesto el documento del nuevo Plan Xeral de Urbanismo, por espacio de tres meses, como en domicilios, según le consta al grupo del PP.

Y aunque el alcalde, con esa respuesta breve, afirmando que es un gasto normal y eficiente, no quiso entrar en el proceso seguido en los dos casos; fotografías y desplegable, para el portavoz no se trata de un tema menor, ya que "estamos hablando de unos 44.000 euros que salieron de las arcas municipales".

Para reprochar al alcalde que, en su línea, no sea capaz de "dar explicaciones", aunque "no espero otra cosa, ya pasaron cinco meses y sigue sin responder a preguntas que hice en pleno".