Destacó que se pudo controlar el fuego, gracias a la pericia de los brigadistas y a la colaboración de los vecinos, a pesar de la adversidad que supuso tener vientos muy fuertes, que propiciaron que el fuego avanzara a una media de un kilómetro por hora, por lo que "se ve claramente como la intencionalidad produce sus efectos".

Núñez Feijóo aclara que el Gobierno "es consciente de la situación en la que estamos", por lo que anunció que continuará trabajando con la mayor intensidad posible". Pero demanda "información", como "un deber de colaboración ciudadana".

El presidente de la Xunta agradeció la extraordinaria labor que están haciendo las brigadas contra incendios de la Administración gallega, apoyadas por todos los medios terrestres y aéreos que están "evitando perjuicios muy serios" en propiedades y personas. Por lo tanto, deja patente su "satisfacción y orgullo" por las 7.000 personas que están participando en la campaña contra el fuego, trabajando para disminuir la repercusión de los incendios y para solventar la mayor parte de ellos en "un tiempo muy corto" y limitar el impacto y el daño que puedan tener otros incendios más difíciles de apagar en las primeras horas, como consecuencia del viento y de otras condiciones atmosféricas adversas.