Representantes sindicales de Galicia y Norte de Portugal se reunieron ayer en la Tecnópole para analizar el presente y el futuro de la industria en la eurorregión en un contexto de "extremada gravedad" para los trabajadores, en palabras del presidente de turno de la Consello Sindical Interregional, CSIR, y líder de UGT-Galicia, José Antonio Gómez. El encuentro multisectorial se incluye en el plan de actividades del Eures transfronterizo, cuya misión es facilitar información sobre oportunidades de empleo.

En este caso, los representantes sindicales y empresariales de ambos lados de la frontera que se dieron cita en San Cibrao das Viñas constataron una realidad poco prometedora para la industria en un territorio en el que, explica Gómez, "todos los sectores están en declive, excepto el de la automoción que más o menos se mantiene".

La innovación tecnológica se presenta para este colectivo como la "única salida a la crisis" frente a una realidad en la que "la destrucción de empleo en la industria es brutal", señaló el presidente del CSIR. Para Gómez, este sector "tendría que ser el motor de la recuperación económica" y no una fábrica de parados fruto de "políticas de suicidio económico que vienen de Europa".

El encuentro se desarrolló durante toda la mañana en el salón de actos del edificio central de la Tecnópole. Tras las primeras intervenciones a cargo de José Antonio Gómez y del director gerente de la Tecnópole, Ricardo Capilla, se celebró un panel de debate sobre las políticas de la Unión Europea y su impacto en el tejido productivo y en los trabajadores de España y Portugal en el que participaron, entre otros, representantes de la Confederación de Empresarios de Galicia, de la lusa CGTP-IN, así como de las asociaciones de metalúrgicos de ambos lados de la frontera y sindicalistas de UGT y CC OO también de Galicia y del Norte de Portugal. Asistieron además los secretarios de ambos sindicatos en Ourense, José Luis Fernández Celis y Ana Barrios, respectivamente.

El consejo sindical demanda un "giro radical" en estas políticas "que nos condenan a mayor precariedad y al desmantelamiento de los sectores productivos". José Antonio Gómez explicó que las pymes en Galicia y Norte de Portugal no pueden competir con "la bajada generalizada de salarios" y critica los "vaivenes" que soporta el sector debido a los cambios de políticas. Pone como ejemplo T-Solar, "que después de una inyección de capital público, por decisiones erróneas del Gobierno está al borde del cierre con un ERE de extinción".