La plataforma de afectados por el proyecto del vial de conexión de la autovía Rías Baixas con el Polígono de San Cibrao acordó ayer presentar una alegación conjunta contra este proyecto de la Consellería de Medio Ambiente. Lo califican de "caro" desde el punto de vista económico. Piden que sea sustituido por un proyecto de optimización de la N-525 que daría "mejores resultados".

Más de un centenar de vecinos de decenas de parroquias de los concellos de San Cibrao da Viñas y Taboadela afectadas por el trazado de este proyecto de conexión vial con el polígono industrial, que creen que el vial abrirá una brecha geográfica entre parroquias y pueblos, se reunieron ayer en local social de Noalla donde, además de esta propuesta a la consellería, señalaron que van a realizar varias alegaciones contra el proyecto a exposición pública.

Según los vecinos, la propuesta de vial incluida dentro del Plan Sectorial del Área Metropolitana de Ourense, prevé un trazado con curvas sinuosas y tramos en pendiente especialmente peligrosos para el tráfico pesado de camiones y mercancías, para que el que está pensado mayoritariamente este vial, y que pasa por alto todas las normas de seguridad.

Crea además brechas etnográficas y paisajísticas en todo este territorio, multiplica trazados y fomenta modelos hoy descartados, por peligrosos, en una vía de alta capacidad, como la creación de accesos a núcleos a través de rotondas.

Añade la plataforma que, al margen de la peligrosidad vial, el trazado previsto resulta más costoso, pues supone recorrer un tramo de 12 kilómetros, frente a los cinco kilómetros que supondría la conexión través de una optimizada N-525.

Por estas cuestiones y por otra larga lista de alegaciones técnicas, de vertebración del territorio y de seguridad que expondrán detenidamente, esta plataforma decidió ayer dar su más rotundo rechazo al proyecto.