La polémica por la instalación en O Irixo de una planta de tratamiento de residuos ha dado un nuevo giro al plantearse otra posible ubicación para la incineradora que la alejaría unos siete kilómetros de Dozón situándola en el límite municipal con O Carballiño. El nuevo espacio pertenece a la parroquia de Campo y afecta a los pueblos de Orosa, Menaz y Casares, cerca de la cooperativa de lácteos Santa Mariña de Loureiro.

Esta propuesta que se planteará a la empresa privada que gestionará la incineradora sale de Manuel Cerdeira Lorenzo, teniente alcalde de O Irixo como número dos en la lista del regidor Manuel Penedo y propietario de parte de los montes en los que Estela Eólica podría construir la planta. En realidad, Cerdeira Lorenzo es el presidente de los comuneros de Menaz y tiene puesto de responsabilidad en la Axencia Galega de Desenvolvemento Rural, Agader, que gestiona los fondos europeos.

Precisamente en calidad de líder de los comuneros convocó ayer telefónicamente a los propietarios para una reunión de urgencia que se celebraría esa misma tarde, a las cuatro, en la escuela de Casares. A la cita solo tuvieron tiempo y forma de acudir unos 20 propietarios de un total de cincuenta. Algunos de ellos contaron al salir que Cerdeira les explicó que a O Irixo le acababa de tocar la lotería para proponerles, a continuación, ceder los montes de forma gratuita a cambio de puestos de trabajo.

"Solo siete u ocho estuvieron en contra (entre ello el presidente de los comuneros de Casares), el resto se sometió a lo que él dijese", según comentaron de forma anónima algunos de los testigos.

De esta forma quedó aprobado por acuerdo de la mayoría allí presente regalar los montes a cambio de trabajo, a pesar de que gran parte de los propietarios son jubilados de edad avanzada.

Esta reunión ha molestado especialmente a los ausentes, y algunos anunciaron ayer que pedirán su impugnación o la anulación del acuerdo ya que la convocatoria no fue notificada con los preceptivos diez días de antelación ni se levantó acta de lo votado.

Este nuevo emplazamiento situaría la incineradora a cuatro kilómetros de la capitalidad de O Carballiño, gobernada por el alcalde del PP, Argimiro Marnotes, y donde ya surgió una plataforma vecinal en contra de la planta. La coordinadora que se creó este sábado en O Irixo pretende despertar el clamor social en contra del basurero por su "elevado factor contaminante" y ya ha activado una página web y creado un espacio en las redes sociales a través de Facebook. El sábado volverán a reunirse, a las 18 horas, en una cita a la que también está invitado el alcalde, Manuel Penedo.