Los universitarios vigueses dejaron pasar la oportunidad de lanzar sus preguntas a los candidatos. Por primera vez en la historia de la institución dos aspirantes se presentaban ante ellos para explicarles cara a cara sus programas y a la convocatoria sólo acudieron una veintena de estudiantes. Casi tantos como integrantes de ambas candidaturas. Acabado el debate, organizado por Comités, a los alumnos también les costó entrar en la ronda de preguntas y fue un compañero veterano del programa de mayores –cuyos matriculados no tienen derecho al voto– el que rompió el hielo para interrogarles sobre sus planes para estos estudios.

Los dos candidatos prometieron hacer énfasis en las políticas de empleo y garantizaron ayudas económicas para estudios y alojamiento en residencias públicas. Jaime Cabeza disculpó a los alumnos por la proximidad de los exámenes y reprochó al actual equipo de gobierno la falta de incentivos para la participación por parte del equipo de gobierno. Aun así, no renuncia a superar el 13,2% registrado en Santiago. Por su parte, Salustiano Mato, criticó que el debate no fuese retransmitido por la UVigo Televisión a petición, según explicó, de la formación rival.

Cabeza, que pretende liderar el primer gobierno de Nova Universidade, reprocha a Mato que algunas de las medidas que propone ya formaban parte del programa de Alberto Gago en las últimas elecciones, tales como la creación de un servicio de traducción y un vivero de empresas. "El papel lo aguanta todo, pero en 2006 ya se prometían prácticas para el 100% del estudiantado", recordó.

Frente a las críticas de Cabeza a los precios "exorbitantes" de las residencias, Mato defendió la gestión de su grupo, Alternativa Universitaria, para construirlas mediante convenios con adjudicatarias y propuso "una política de ayudas intensa" para los alumnos, además de cobertura para la oferta de pisos de alquiler. "Yo he hablado de futuro, mientras él lo hizo de pasado", valoraba al término del debate.

Cabeza se comprometió a gestionar la Universidad de "forma más austera", a luchar contra la externacionalización "galopante" y a reducir la presencia del banco Santander, una de las "herencias" de Alternativa. También propuso nuevas políticas de empleabilidad y atención a la diversidad y el bienestar a través de un vicerrectorado propio.

"No se trata de mirarnos el ombligo, sino de sudar la camiseta", respondió Mato, quien criticó los préstamos que propone Nova Universidade porque "endeudan más a las familias". Si sale elegido rector, creará un "área moderna y potente de empleo" para acceder a fondos europeos y luchará por la "congelación" de las tasas.

A preguntas del público asistente, ambos aplaudieron el consenso alcanzado entre las carreras técnica y superior de Ingeniería Industrial para convertirse en un solo título y se comprometieron a proporcionar a los inscritos en el programa de mayores el mismo estatus que al resto de estudiantes y a estudiar "caso por caso" la transición a los grados.

Hubo preguntas concretas como la imposibilidad de los titulados de Ciencias del Mar de acceder a las oposiciones de la Xunta, tema que Cabeza volvió a reprochar al grupo de gobierno, y otras más generales como el uso del gallego. Mato aseguró que lo defiende en sus ochenta programas de actuación y Cabeza garantizó la posibilidad de tener apuntes y hacer los exámenes en este idioma.