X.M. del Caño / Ourense

El Concello de Ourense busca captaciones de agua alternativas a los embalses de Castadón y Cachamuiña, en el Loña, al entender que el río Miño, al que recurre para bombear agua de forma estacional, "no es una fuente inagotable". El titular de la Concejalía de Medio Ambiente, Demetrio Espinosa, explica que la administración local está estudiando otras zonas de toma, para conseguir más agua, además de contemplar la posibilidad de extraerla del subsuelo, con el fin de reforzar el suministro en las nuevas zonas de expansión de la ciudad.

Espinosa gestiona la realización de "un estudio hidrológico profundo del subsuelo", sobre todo en los alrededores de la ciudad, "para realizar captaciones de tipo puntual en las zonas que no llegue la presión del agua".

"Yo no soy partidario de que se realicen bombeos del Miño para las nuevas urbanizaciones, como se pretendió hacer en su momento. El problema se puede solucionar con muchas pequeñas captaciones, o captaciones de cierto volumen, conectadas con un punto común de almacenamiento, para servir a una zona. En definitiva, esto es lo que está pensando la Confederación Hidrográfica del Norte, cuando habla del proyecto de nuevas captaciones para la ciudad de Ourense", afirma Demetrio Espinosa.

La mejora de la calidad del abastecimiento a la ciudad también depende del saneamiento del río Miño, por lo que la nueva confederación hidrográfica que llevará su nombre, tendrá que marcarse como meta solucionar los problemas de depuración de la ciudad de Lugo, del polígono industrial de Monforte de Lemos y de la zona rural de las provincias de Lugo y Ourense por las que transcurre el cauce del Sil y del propio Miño.

El Concello tratará de complementar estas medidas con la reducción del consumo en un 30%, dado que cada ourensano gasta en la actualidad 320 litros de agua al día, cantidad que el edil de Medio Ambiente considera "una salvajada". Espinosa se marca como meta que la cantidad se rebaje a 200 ó 230 litros por habitante. Recuerda que el consumo en Barcelona, antes de la crisis del agua, era de 115 litros por persona.

"El bombeo del Miño se podría demorar hasta el otoño"

Los cambios que se están registrando en el clima de la provincia, "rompen por completo la estacionalidad" de los lugares de captación de agua en Ourense. Después de un largo período de sequía, "ahora mismo tenemos llenos los embalses de Cachamuiña y Castadón", en el río Loña, "por lo que en lugar de iniciar el bombeo del agua del Miño en el verano, como solía ser habitual, todo parece apuntar a que este año podremos esperar hasta el otoño", indica Demetrio Espinosa.

El concejal de Medio Ambiente considera que el servicio debe adaptarse al cambio de ciclo climático que se está registrando, "con períodos de fuerte sequía, que se alternan con épocas de intensa lluvia".