Protección Civil tuvo que acudir ayer, por segundo día consecutivo, a retirar varias ramas de árboles caídas sobre la carretera PO-315 a su paso por Aldán, obligando a cortar la circulación rodada en uno de los carriles y a la Policía Local a regular el tráfico hasta que la calzada quedó despejada. Los vecinos se quejan de que los árboles están muy próximos a la carretera, ocultan el alumbrado público y dificultan el tránsito rodado y peatonal, por lo que exigen a la Xunta, como administración responsable, que "tome medidas de una vez por todas" para solucionar la situación. Aseguran que ya han trasladado quejas por los mismos motivos en otras ocasiones, pero hasta ahora no ha habido respuesta.

El viento partió el jueves uno de los ejemplares que bordea la vía por la margen izquierda en dirección Bueu, entre la conocida como "recta do conde" y el desvío a Areacova. La lluvia volvió a cargar de peso las ramas y ayer se produjo otro desprendimiento que obligó a intervenir a los efectivos municipales. Los vecinos auguran que no será el último, pues hay otros ejemplares con las mismas características y aún queda todo el invierno por delante.

Accidentes

La de Aldán no fue la única salida que tuvieron que hacer ayer los equipos de emergencias de Cangas. En el centro urbano, el conductor de un Honda Civic perdió el control de su vehículo hasta empotrarse con un Toyota estacionado en la Avenida de Vigo, en la margen derecha en dirección Bueu. Al lugar se trasladó una ambulancia del 061, aunque nadie resultó herido. La Policía Local tuvo que regular el tráfico hasta retirar el vehículo atravesado en uno de los carriles y se hizo cargo del atestado.

También una salida de vía movilizó a la Policía Local, 061 y Protección Civil hasta el lugar de O Viso. Estuvo implicado un Peugeot 205, cuyo conductor perdió el control hasta acabar empotrado contra la barrera quitamiedos, evitando que el vehículo cayera por un desnivel del terreno. La ambulancia trasladó a sus ocupantes hasta el centro de salud de Cangas, con golpes y magulladuras supuestamente leves, para una revisión facultativa.