La delegación formada por casi una veintena de alfombristas de Bueu dejó ayer el pabellón bien alto en la isla de Gozo, dentro del archipiélago de Malta. Y eso que no lo tuvieron nada fácil. Los alfombristas se encontraron con el que probablemente es su peor enemigo: el viento. Aún así el resultado fue espectacular y la experiencia "maravillosa", como trasladaban a sus compañeros.

La Asociación Cultural Alfombras de Bueu es una de las delegaciones invitadas a mostrar su trabajo durante la Conferencia de Presidentes de Regiones Marítimas Periféricas de Europa, que se celebra estos días en Malta, y era la única representación gallega. El diseño estaba compuesto por una sucesión de diez alfombras, cada una elaborada por una de las delegaciones participantes y enlazadas entre sí en forma de pétalo. El pétalo de Bueu tenía unas dimensiones de 7 metros de largo y 3,5 de ancho. Los alfombristas tenían previsto empezar a trabajar a las 6.45 horas, pero finalmente no pudieron empezar hasta cerca de las 7.30 horas. A pesar de todas las dificultades lograron completar su diseño a tiempo. El dibujo elegido recrea una escena típicamente marinera en un puerto pesquero. Para su elaboración los alfombristas de Bueu se llevaron algunos de los materiales que suelen utilizar aquí, como la concha de berberecho, semillas o flores.

El evento estaba organizado por la Comisión Internacional de Entidades Alfombristas de Arte Efímero y tuvo lugar en el consejo local de Victoria, en la isla de Gozo, que a su vez forma parte del archipiélago de Malta. Los alfombristas participaron ayer en un desfile conjunto y en una recepción oficial. Mañana domingo regresarán de nuevo a Bueu.