Si para Cangas Decide el corte del Corredor do Morrazo iniciado en noviembre supuso una "falta de sensibilidad" con los vecinos de la comarca, la reapertura temporal desde ayer le parece "una broma de mal gusto" con la que la Xunta está "ninguneando" a los ciudadanos, señala la formación que lidera José Luis Gestido, que entendería la realización de cortes de tráfico "puntuales" para llevar a cabo explosiones o grandes desescombros, pero no que esté inoperativo por períodos tan prolongados, lo que también repercute de forma negativa en las vías alternativas.

"Desde la Xunta deberían entender que la densidad de tráfico que soporta la PO-551 es elevada y están provocando un gran problema a muchos vecinos" que se desplazan a diario por razones laborales, de estudios o sanitarias, y también a los residentes en las zonas de paso, que padecen las retenciones de vehículos y el mayor riesgo para los peatones. "En definitiva, un caos", resume Cangas Decide, que responsabiliza de ello a la Administración autonómica, por "incumplir sus promesas" de reforzar y acondicionar la PO-551, pero también a los representantes políticos de Cangas y Moaña, "que han querido mirar para otro lado" en lugar de exigir que las cosas se hicieran de otro modo.

"Seguro que si estuvieran en la oposición estarían reclamando, incluso presionando con manifestaciones, la barbaridad que se estaba haciendo", incide el grupo que lidera Gestido, que exige mantener abierto algún carril del Corredor, aunque haya cierres puntuales, y llevará el asunto al próximo Pleno.