Hace menos de dos semanas el pleno de Bueu aprobaba una moción a instancias del BNG para exigir al Estado la transferencia de la autopista AP-9 y ayer la formación nacionalista presentó en el municipio la campaña que promueve para conseguir este objetivo. Una iniciativa que entienden que en estos momentos debe intensificarse aún más debido al cierre del Corredor do Morrazo y a las obras de ampliación del puente de Rande. "Hai moitos veciños que se teñen que desprazar diariamente a Vigo a traballar e que tiveron que modificar os seus itinerarios, usando a Variante de Marín e collendo a autoestrada dende Pontevedra", afirman el alcalde de Bueu, Félix Juncal, y el edil de Urbanismo e Medio Ambiente de Moaña, Odilo Barreiro. Eso implica que deben asumir el pago del peaje y sufren unos gastos económicos a mayores. "Deben ser compensados e hai que tomar medidas inmediatas", reclaman.

La formación nacionalista aprovechó la jornada del mercadillo de ayer para repartir una serie de folletos informativos y hasta Bueu se desplazó su secretaria de Organización, Montse Prado, para explicar y defender una reivindicación que consideran de justicia. "É unha infraestrutura que está máis que amortizada. Audasa recauda cada día en Galicia 300.000 euros e nestes anos leva ingresados 2.200 millóns, dos que 750 millóns foron de beneficio", expuso ayer.

Las acciones reivindicativas que emprenderá el BNG tendrán reflejo el sábado, en un llamamiento que desde la formación realizan a la ciudadanía. Se trata de que a partir de las 11.00 horas los conductores que pasen por los peajes de la AP-9 paguen el importe con monedas de un céntimo, una medida simbólica para "visibilizar o descontento da poboación e reclamar que isto debe cambiar".

Antes de que el BNG llevase esta moción a los plenos de los ayuntamientos se había aprobado una proposición por parte del Parlamento de Galicia, un acuerdo adoptado por unanimidad y que ha sido rechazado por el Gobierno del Estado alegando razones presupuestarias. Prado exigió ayer en Bueu al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, "vontade política" para forzar el rescate. Feijóo reiteró este mismo fin de semana que la transferencia de la AP-9 era una prioridad y desde el BNG le exigen que "se deixe de palabras bonitas e exerza como presidente". Recuerdan que recientemente el Estado aprobó el rescate de las autopistas radiales de Madrid. "Van destinar 8.000 millóns de euros de cartos públicos non ao rescate dos cidadáns, senón a salvar a empresas afíns", reprochan.

Agravio comparativo

La petición del rescate de la autopista se justifica en que supondría la capacidad para decidir la supresión del peaje y mejorar un mantenimiento que ahora mismo se considera "malísimo", tanto en la conservación del firme como en la iluminación, argumentan desde el BNG. Por otro lado, la actual situación supone un "agravio" con respecto a otras zonas de España donde los propietarios del Audasa, el grupo Citigroup, aplica descuentos y bonificaciones en sus autopistas. En la actualidad, en términos comparativos, la AP9 es una de las autopistas "máis caras do Estado, nunha zona onde están os salarios máis baixos", sentencian.