Aunque el gobierno tripartito reconoce que lo ideal sería ampliar la superficie de aceras en detrimento del asfalto, la escasez de presupuesto municipal obliga a suplir esa fórmula con el pintado de la vía pública. El objetivo es "conectar cun corredor peatonal" toda la franja urbana desde Rodeira hasta el centro urbano, "privilexiando as persoas sobre os coches".