El desbroce de fincas de Massó que pertenecen a Abanca y los viales que las comunica, paralizados por desavenencias sobre posibles daños a la fauna y la flora, se retomarán mañana tras superarse las desavenencias sobre los criterios a seguir y fijarse sobre el terreno dónde se puede actuar y dónde no. Así lo asegura la concejala de Medio Ambiente, Tania Castro, que protagonizó estos días una polémica con su compañero delegado de Urbanismo, Mariano Abalo, por enviar este a la Policía Local a paralizar el desbroce tras conocer la denuncia de un colectivo ecologista sobre sus efectos negativos en época de cría, especialmente para las aves.

La edil explica que se utilizarán medios humanos o mecánicos en función de las características de cada zona y que desde su concejalía se hará un seguimiento "diario" de los trabajos para confirmar que se hacen conforme a los criterios marcados, en beneficio de los vecinos y del medio natural.