Una vecina alertaba ayer a la Policía Local de Moaña de la presencia de un cisne blanco en la playa de A Xunqueira y temía que pudiera estar corriendo peligro y muriera por falta de comida. Aseguraba que no se acercaba ni a comer el pan que ella le había depositado. Desde la Policía se alertó al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Cotorredondo, pero declinaron desplazarse hasta Moaña porque ellos solo recogen animales heridos y en este caso el cisne no lo está.
Habrá que esperar a cómo se adapta el animal a su nuevo entorno. Fuentes consultadas apuntan a que el cisne podría tratarse de una cría de una pareja que vive en la isla de San Simón y que sería normal que la cría dejara su entorno porque es un comportamiento habitual en esta especie.
Lo que no es nada habitual es ver un cisne viviendo de forma silvestre en la playa de A Xunqueira, aseguraban otros vecinos acostumbrados a ver estas aves en los parques y con chips identificativos.
Hay que recordar que desde hace un tiempo también hay preocupación por la desaparición de la población de cisnes de la conocida como la Illa das Esculturas de Pontevedra, en donde se creó un grupo ciudadano "Salvemos a nuestros cisnes". En Europa estamos acostumbrados a ver el cuidado que los ingleses profesan a los cisnes del río Támesis, propiedad de la Reina, y que todos los años son sometidos a un recuento que se conoce como Swan Upper en el que los swan markers se introducen en el río para llevarse los ejemplares y sus crías en una baca de madera a tierra y proceder al recuento.
