Liméns no decepciona como Madrid. Los vecinos de esta localidad canguesa tienen aseguradas sus juegos olímpicos todos los años. Cierto que no cuentan con el prestigio de los deportivos, pero están íntimamente ligadas a la vida diaria de la localidad. Porque por alguna razón Liméns es más cómplice de la agricultura que de la pesca. Por eso su particular competición se fundamente en practicar deporte utilizando útiles de labranza, como el lanzamiento de "o sacho" o el de "debullar" mazorcas de maíz. También se organizan carreras de carretillas y carreras de saco, además de aprender a confeccionar cestos.
Esta particular fiesta está organizada por la Asociación Cultural Afartacáns. No hay villa olímpica ni estadio. Todo se celebra al aire libre en el lugar denominado Frondoal. Pero aquí sí que se permite el alcohol y las comidas ricas en colesterol. Es un torneo más parecido al de la aldea gala de los personajes Astérix y Obélix, que a la cita mundial de origen griego. Numerosas personas participaron ayer en los distintas disciplinas.
