La actualización de valores catastrales en Bueu para el año 2016 será una realidad y no tiene marcha atrás. El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas confirmó ayer a FARO que la solicitud de renuncia remitida por el Concello de Bueu se presentó fuera de plazo, por lo que se mantiene el alza del 10% prevista inicialmente. Lo que sí bajará es el tipo impositivo, algo que depende de la administración local, y que pasa del 0,60 al 0,45. La unión de estas dos variables no impedirá una reducción en el recibo del IBI, pero no será del 25% sino de aproximadamente un 18%.
La Dirección General del Catastro remite cada año una circular a los municipios en la que les informa de la posibilidad de actualizar los valores catastrales. La Gerencia Territorial de Pontevedra envió esa comunicación al ayuntamiento de Bueu a mediados del mes de junio, con un coeficiente de actualización equivalente al 10%. Este año el periodo para acogerse a esta medida se amplió hasta el 31 de julio debido a la celebración de las elecciones municipales en el mes de mayo y la constitución de las nuevas corporaciones locales. El gobierno de Bueu con fecha 10 de julio decidió solicitar ese incremento en los valores catastrales para compensar la caída en la recaudación municipal puesto que el tipo impositivo en 2016 baja un 25%, del 0,60 al 0,45. Esto supondrá una reducción de 400.000 euros en el padrón del IBI.
Desde el ministerio explican que ciertamente existe un plazo para renunciar a la revisión, pero es exactamente el mismo que para presentar la solicitud. Es decir, el desestimiento tenía que comunicarse como muy tarde el 31 de julio. "El escrito del ayuntamiento de Bueu es del 9 de septiembre y con fecha de entrada del 15 de septiembre", explican desde el ministerio.
Esta situación contrasta con lo sucedido en 2013, al menos según la versión del Concello. Desde el gobierno local aseguran que en aquel entonces se pidió también la actualización de valores y a finales de septiembre se presentó otra renuncia. "Non se chegou a contestar, simplemente se aplicaron os valores previos", afirman desde el ayuntamiento. Sin embargo, desde Hacienda aseguran que en aquel entonces también se rechazó esa solicitud.
El ministerio precisa que el esfuerzo impositivo que deben soportar los ciudadanos en realidad "lo dictan los ayuntamientos" a través de los tipos impositivos. "Los municipios pueden modular esos coeficientes hacia arriba o hacia abajo o aprobar bonificaciones", subrayan.
Eso es precisamente lo que hará en 2016 el consistorio buenense, con una reducción del 25% en el tipo impositivo. El ejecutivo local defiende que la actualización de valores catastrales se planteó para compensar esa pérdida de recaudación, que pasará de 1,6 millones a 1,2, y "blindar as políticas sociais" puesta en marcha en los últimos años. Con la revisión se pretendía elevar el padrón en aproximadamente 100.000 euros, hasta el entorno de los 1,3 millones. El argumento municipal para rectificar y prescindir de esa medida es el Plan de Regularización Catastral, con la apertura de unos 1.300 expedientes y con una recaudación prevista cercana a esos 100.000 euros.
