La Guardia Civil tuvo que desviar el tráfico en el Corredor de O Morrazo, en el kilómetro 11, un poco antes de la salida de Cangas. El remolque de una furgoneta que iba a cargado de escombro volcó y durante una hora se habilitaron carriles con conos para permitir que el tráfico fluyera en ambas direcciones. El accidente se produjo a las 11,15 horas y la furgoneta circulaba dirección Cangas. No hubo heridos, solo se registraron daños materiales. El conductor del vehículo informó a la Guardia Civil que se había obligado a dar un volantazo a la furgoneta porque un animal había entrado en la vía y trataba de esquivarlo. A la hora de redactar esta información se desconocía aún que clase de animal logró entrar en el corredor, si se trataba de un perro, un jabalí o un zorro (estos días se vieron varios en la vía).

Mientras la Guardia Civil regulaba el tráfico en la vía, Limpieza de Carreteras procedía a retirar el escombro que se esparcía justo por el desvío a Cangas, lo que obligó a muchos conductores a coger la salida de A Portela para entrar en Cangas.

Protección Civil de Cangas también se acercó hasta la zona. La alerta no especificaba muy bien si el accidente se había producido en el término municipal de Cangas o en el de Moaña.

La presencia de animales en la calzada es algo que la Xunta de Galicia no fue capaz de controlar en el Corredor de O Morrazo ya desde la época del bipartito. En numerosos sitios las cercas metálicas están rotas y para los animales es muy fácil accder a la calzada. En su momento ya se reclamó un mayor control sobre el mantenimiento de la valla protectora.