Vecinos de Domaio recurrieron ayer a la Asociación Monte Faro de esta parroquia de Moaña, que preside Luis Varela, para que se ponga fin a la tortura que sufren desde hace más de diez días, con un nido de avispa velutina, popularmente conocida como asiática, que la Xunta no retira pese a que, según manifiestan los afectados, avisaron en varias ocasiones. El nido se encuentra en un árbol en la zona verde del Souto, en el jardín de camelias, a unos 4 o 5 metros de altura, y en estos momentos el tamaño del avispero ya sobrepasa al de un balón de fútbol playa. Los vecinos aseguran que llamaron al teléfono de la central de emergencias 112 y también al indicado para estos casos, el 012, pero a día de ayer nadie enviado por la Consellería de Medio Rural acudió a la zona para retirarlo.

Los afectados están muy alarmados porque el nido crece a gran velocidad y está instalado en un árbol muy cerca de un parque infantil y de una fuente. Aseguran que suele tratarse de una fuente muy frecuentada para coger agua potable y manifiestan que han dejado de acudir "por miedo". El presidente de la Asociación de Vecinos, Luis Varela, visitó ayer la zona y pudo comprobar el gran tamaño del nido y que realmente supone un peligro para los vecinos. Hay familias que tienen miedo a que los niños acudan al parque, lógicamente, porque no sabes cómo va a ser el comportamiento de estos insectos cuando la población crece tanto: "Un ataque de estas avispas puede ser una tragedia. Hay vecinos que son alérgicos y están pasando mucho miedo", asegura una de las afectadas.

Desde la Asociación de Vecinos trasladaron ayer el problema al Concello que a lo largo del verano ya ha recogido también numerosas alertas por la presencia de nidos. Las dos primeras fueron en julio, en una casa detrás de la Iglesia del Carmen, y otra en Tirán.