La Policía Local y la Guardia Civil fueron alertadas, ayer por la mañana, de la presencia de dos mujeres que se hacían pasar por colaboradoras de la Asociación de Enfermos y Donantes de Órganos para Transplantes (Aedopat) -una entidad social que tiene su sede en las Islas Baleares- y pedían dinero para ese colectivo a las personas que transitaban por el entorno del centro de salud de Cangas. La actitud de las mujeres levantó sospechas de algunos usuarios del ambulatorio y uno de ellos, que es donante y desconocía que estuviera en marcha tal campaña, indagó en los pormenores de la misma, llegó a la conclusión de que se trataba de una estafa y lo comunicó al Concello y a las fuerzas policiales para que actuaran.

En las oficinas de Aedopat en Palma de Mallorca explicaron que, por ley, solo pueden pedir ayudas personas autorizadas, debidamente identificadas y con los folletos informativos de la asociación. Señalaron que las dos mujeres se llaman Ana y Alicia y ya fueron denunciadas en otras ocasiones en Pontevedra. A principios de septiembre de 2013 fueron sorprendidas en Pontevedra por agentes de la Policía Local después de haber logrado el "donativo" de una docena de personas, supuestamente para familiares de donantes.

En el Concello de Cangas no tenían constancia de la concesión de ningún permiso a colectivos de donación de órganos. El concejal de Servizos Sociais, Igualdade e Benestar, Tomás Hermelo, reconoció que había sido alertado de esta supuesta estafa por algunos vecinos y dio traslado de ello a la Policía Local para que lo pusiese en conocimiento de la Guardia Civil, que tiene competencias en esta materia. Poco después, ambas mujeres ya habían "desaparecido" del entorno del centro de salud, según las fuentes consultadas.