Un grupo de vecinos de Meiro, en Bueu, estrenó ayer el programa formativo sobre técnicas de educación ambiental impartido en el complejo medioambiental de A Portela por medio centenar de alumnos de los ciclos medio y superior en aprovechamientos forestales y conservación de la naturaleza de la Escola de Capataces de Lourizán. Los ciudadanos tuvieron oportunidad de abrir bolsas de basura cogidas al azar y comprobar cómo contienen mezclas de materiales que deberían depositarse en contenedores específicos, lo que mejoraría el sistema y evitaría costes en el servicio que también repercutirían positivamente en el bolsillo del consumidor, al abaratar el recibo que se paga.

La experiencia incidió también en la necesidad de reciclar y reutilizar materiales y objetos que se desechan cuando sería posible darles una segunda vida. En esa línea explicaron, de forma práctica, el funcionamiento de los composteros y se aprovechó papel usado para realizar unas prácticas carpetas a través de una prensa específica, así como para elaborar pellets destinados a alimentar calderas de calefacción o convertirlo en confeti con el que dar una nota de color a las celebraciones festivas.

Asimismo, técnicos y vecinos pudieron conocer el funcionamiento de la planta de transferencia de residuos de la Mancomunidade en una experiencia que también sirvió a los profesores de Lourizán para evaluar en la práctica el aprovechamiento de las enseñanzas teóricas que reciben los alumnos, según explicó la tutora Carmen Alfonso, que se encargó de coordinar la actividad en el Día do Medio Ambiente.