La mayoría que sustenta al gobierno local le permitió sacar adelante la solicitud de crédito para hacer frente al segundo plan de proveedores y saldar las deudas con las empresa Aqualia y Acciona. El crédito es por un importe de 857.000 euros y el gobierno local se ahorra 700.000 euros en pagos de interese de demora que tendría que hacer efectivo si las empresas no se acogieran a esta vía, ya que había sentencias firmes que condenaba al Concello a estos pagos. Para el edil de Hacienda, Pío Millán, se trata de una operación que vale la pena, para la oposición, un negocio redondo para la banca. Y es que todos los partidos recordaron al PP que el Gobierno había dejado el dinero a los bancos al 1% y que los municipios tenían que pagar hasta un 6% de intereses. Todos coincidieron en señalar que hubiese sido mucho más normal y se ahorraría mucho más dinero si el Gobierno de Mariano Rajoy hubiese entregado directamente el dinero de los préstamos a los concellos. Para la oposición, de nuevo se beneficia a la banca. Para el portavoz de ACE, Xosé Manuel Pazos, el Gobierno es un casino, donde la banda siempre gana