Vecinos del barrio de Vilariño han dado la voz de alarma al asegurar que las playas de Vilariño y Arneles han sufrido la pérdida de muchos metros cúbicos de arena a lo largo de los últimos meses, lo que se reflejaría sobre todo en la parte sur de ambos arenales, en donde con la marea alta cada vez hay menos ancho de playa y, cuando el mar baja, los arenales presentan unos desniveles importantes. Estas inclinaciones no se corresponderían con el tradicional perfil plano de ambas playas.

Atribuyen lo ocurrido a un cambio paulatino en las corrientes como consecuencia de las distintas obras en la ría de Aldán, por lo que esperan que se estudien las causas con detenimiento antes de emprender algún proyecto como el de la ampliación del muelle de Aldán, por el temor a que provoque nuevos cambios en las corrientes marinas.

Mucha de esta arena está formando bancos en la playa de San Cibrán.

Ante este aviso el edil de Medio Ambiente y Playas, Jesús Graña, asegura que en el Concello no tienen conocimiento del problema, pero promete prestar atención al estado de esta playa. "De momento non constatamos nada raro, pero en breve se fará o informe do estado dos areais previo á temporada de verán", apunta.

Señala, como una de las posibles causas, la subida del río Esteiro, y es que este año, como consecuencia de las fuertes lluvias, los cauces bajaron cargados de agua y el arrastre fue mayor, lo que pudo retirar mucha arena de los márgenes de los ríos.

Recuerda que hace unos años ocurrió una situación similar en Area Brava cuando, entre la acción del río que desemboca en esta playa, y de las mareas, quedaron al descubierto piedras en el litoral que no conocían los vecinos de la zona.

Estas dos playas entran en los planes del gobierno local para convertirse, en un año, en el municipio gallego con más banderas azules.