El conselleiro de Infraestructuras y Medio Ambiente, Agustín Hernández, asegura respecto al rechazo que ha originado el trazado presentado por la Xunta para la variante de Cangas, vallada y con desniveles de hasta 17 metros de altura, que lo que quiere la Xunta es que "sea una vía integrada en el tejido de Cangas y que no sea una barrera. En esa línea vamos a trabajar y para eso se ha sacado a información pública y se ha ampliado un mes el plazo de exposición". Dice que lo que se ha presentado es un trazado para que "la gente tenga una referencia de una vía que no se parezca al acceso que tiene, por ejemplo, la vía rápida sino parecida a la Ronda Leste que tiene Lalín que une el corredor de Chantada con la carretera de Santiago". Añade que él ve más "una vía de circunvalación que no sea una calle, pero sí una vía con vocación urbana, como la de Lalín, que está ajustada al territorio, al perfil del terreno y con un impacto pequeño que permite evitar el paso de coches por el centro".

El rechazo que ha suscitado el proyecto de trazado en Cangas está motivado principalmente al carácter cerrado del vial. Vecinos y Concello coinciden en reclamar que la circunvalación sea una vía urbana más. El vial, con casi 2 kilómetros de longitud, discurre entre la rotonda de A Rúa y la PO-313 en A Madalena. por la zona norte del casco urbano de Cangas y contempla un enlace con la avenida de Marín, en el casco urbano. Para su trazado se tuvo como referencia la reserva de suelo que contemplaban las Normas de Urbanismo de Cangas del año 94, aunque de los 18 metros de afección de entonces, se ha pasado ahora a 30, algo a lo que se oponen también los vecinos.

El conselleiro asegura que la intención era hacer una vía que se ajustara a las normas subsidiarias: "Si hay algún punto en el que haya que hacer ajuste, se realizará".

En cuanto a la reivindicada obra del desdoblamiento del corredor en autovía de cuatro carriles para mejorar su seguridad, insiste en que "ya lo hemos dicho, lo que tenemos que hacer es el trabajo de dejar cerrado el diseño. Se ha planificado en dos fases, la primera es el tramo hasta el acceso de Cangas y la segunda hasta el Alto da Portela y a partir de ahí, como no tenemos ninguna duda de que es una actuación necesaria y prioritaria, hay que buscar los recursos que ahora mismo en los presupuestos no tenemos, pero los buscaremos". Confirma que la obra se hará por vía presupuestaria "no está ahora mismo la situación como para pensar que se puede hacer como teníamos previsto de concurso por concesión de obra pública" que quiere decir a través de la iniciativa privada mediante una empresa adjudicataria que adelanta la inversión a cambio de una concesión por un plazo de tiempo (se había previsto por 25 años) por la que recibía un canon anual en función del número de vehículos. El concurso anterior incluía también en el paquete de la concesión el mantenimiento todas las vías autonómicas de la comarca.

Sobre las críticas respecto a que el plan se había presentado solo con fines electoralistas ante la proximidad de los comicios autonómicos, el conselleiro asegura que "la hoja de servicios la tenemos acreditada, no solo de estos cuatro años, sino de toda la gestión que hicimos en la etapa anterior. Se hizo planificando, haciendo lo que hay que hacer. La consellería registró una capacidad de gestión importante, se aprobaron documentos importantes, como el Plan do Litoral o las Directrices del Territorio y seguimos trabajando". Así, rechaza que el documento se hubiera presentado con el fin de que no saliera adelante y con fines puramente electoralistas: "Hay que tener memoria, aquí se presentó un proyecto de corredor, la vía rápida, la primera de todas, que se sacó a información pública, hubo alegaciones, se buscó una nueva en la época de Cuiña y al final se rechazó y se acabó haciendo el corredor muy parecido al que se ha diseñado, aunque con la diferencia de que 10 años después se hizo con un diseño desdoblado.. Es evidente de que la idea que siempre hubo es de hacerlo".