Cangas puede presumir de contar con un belén que una familia del casco histórico instala de forma ininterrumpida desde 1951 y que puede ser visitado por el público. El Belén de Francisco Martínez cumple estas navidades 60 años de vida gracias a la tradición belenista que se heredó en la familia, de padre a hijo, y de la que Francisco es hoy su fiel testaferro. Administrativo de profesión, dedica la mayor parte de sus ratos libres, a lo largo del año, a trabajar en el nuevo nacimiento que siempre monta en el bajo de la vivienda de la calle Berbetaña y que este año abrirá el próximo domingo, día 18.

Cada Navidad, el nacimiento ofrece novedades. En esta ocasión y con motivo del 60 aniversario, Francisco Martínez, quiere rendir un homenaje a su padre -también Francisco- ya fallecido, y para el belén recuperará un antiguo castillo suyo y montará un pequeño desierto que hacía tiempo que no incluía. Además incluirá otras novedades diseñadas y elaboradas por él mismo en las que trabaja desde enero en su pequeño taller, que son tres figuras en barro consistentes en un árbol con niños colgando y una vaquilla que titula "Vaquilla"; un pastor con rebaño y un camello de huida de Egipto que titula "El camellero vigila el carro". Además ha construido un gran puente en corcho de porex para figuras de 20 centímetros, imitando piedra irregular y con un ojo por el cual aparecerá un gran torrente de agua en cascada.

Francisco Martínez asegura que el nacimiento de este año lo ha diseñado más en vertical, con 2,50 metros de altura y marcado por el agua que cae desde una montaña, donde se extiende el pueblo, hasta casi el suelo en donde habrá un gran lago: "Este año se ve el final del río, va a gustar mucho", asegura el belenista. También mostrará en el nacimiento el conjunto de la Sagrada Familia que elaboró el año pasado y con el que quedó finalista en un concurso belenista en Castellón, pero que nunca se pudo ver en Cangas.

La pieza de la vaquilla consiste en una composición de cuatro figuras: un árbol elaborado en barro y hojas plásticas y dos niños subidos a las ramas huyendo de la vaquilla que los ve desde el suelo. La pieza "pastor con rebaño" incluye hasta 21 ovejas arremolinadas junto al pastor y su perro; y "El camello vigila el carro" es una composición de tres figuras independientes que forman una bella estampa en la cual aparece un camello sobre el que viaja un camellero vigilante del carro que arrastra y en el que duermen su esposa y el niño.

El nacimiento contará este año con algo más de 200 figuras y una superficie de unos 25 metros cuadrados. Volverá a contar con los efectos del día y de la noche y los sonidos de los animales como el de los grillos, bueyes, perros, ovejas o el del amanecer con el del gallo.

El belén de Francisco Martínez cuenta además con una página web, que elabora, como colaborador, Pepín Lorenzo, en donde se cuenta la historia de los últimos nacimientos, con videos también de las instalaciones y con el paso a paso en la elaboración de las nuevas figuras por parte del belenista. El nacimiento tuvo el año pasado más de 2.000 visitas y la web más de 1.500.